El peeling puede realizarse como un tratamiento por sí solo, o como paso previo a un tratamiento de estética facial con el objetivo de que la piel esté en las mejores condiciones posibles para recibir los principios activos que necesita.
Si quieres conocer más sobre el peeling y su importancia en los tratamientos de estética facial continua leyendo.
La importancia del peeling en los tratamientos de estética facial
La finalidad del peeling es retirar las células muertas que se van depositando en la epidermis y que provocan que no se regenere correctamente. Esto provoca un efecto oclusivo cuyo resultado es una piel asfixiada y apagada.
Peeling químico
El peeling químico, como su propio nombre indica, consiste en aplicar una sustancia química (un ácido) sobre la piel para eliminar las capas más superficiales y las células muertas.
Se utilizan ácidos glicólico, láctico o salicílico. Cuando aplicamos enzimas de fruta se habla de exfoliación enzimática.
Dentro del peeling químico hay distintos niveles:
- Superficial: en caso de arrugas finas, puntos negros, tendencia al acné y manchas.
- Medio: cuando hay arrugas más fuertes, acné activo o lesiones más grandes relacionadas con la pigmentación de la piel.
- Profundo: en caso de arrugas profundas, acné cicatrizado o machas más llamativas.
En función del tipo de piel se elegirá un tipo de ácido u otro:
- El ácido glicólico: indicado para pieles maduras y exfoliaciones profundas.
- El ácido láctico: es más suave y se recomienda para eliminar manchas y dar luminosidad a la piel.
- El ácido salicílico: es el que mejor actúa en las pieles grasas con tendencia al acné, ya que purifica y desinflama.
El peeling químico es un tratamiento efectivo, pero puede resultar agresivo en alguna pieles.
Peeling mecánico
El peeling mecánico actúa por abrasión. Las impurezas son removidas por un movimiento de fricción que produce un arrastre mecánico gracias al contenido de micropartículas sólidas en el producto exfoliante.
Con este peeling eliminaremos las capas cutáneas más superficiales promoviendo su renovación.
Las partículas de arrastre pueden ser de origen vegetal, mineral, animal o incluso sintéticas.
Es un tratamiento suave, se limita a la capa superficial de la piel y no tiene efectos secundarios.
Este peeling nos permite trabajar con excelentes resultados cualquier tipo de piel por muy sensible que ésta sea.